El minimalismo en la arquitectura hospitalaria
El minimalismo en la arquitectura es una corriente estética y funcional que busca la esencia de los espacios mediante la simplificación y la eliminación de lo superfluo. Surgida en la segunda mitad del siglo XX, esta tendencia se caracteriza por la utilización de formas geométricas puras, líneas limpias y una paleta de colores neutros, con el objetivo de crear ambientes que transmitan serenidad, claridad y orden.
Por ello, hoy en este artículo queremos contaros cómo introducir el minimalismo en las obras y diseños sanitarios, para conseguir un ambiente de calma y relajación, que tenga como consecuencia en los pacientes un incremento de su salud.
Para entender cómo llevar a cabo un proyecto minimalista en el sector hospitalario, es necesario conocer de antemano, de qué pilares se nutre este tipo de arquitectura. Lo que fundamenta este diseño es la reducción de elementos sobrantes, para dejar un espacio pulcro y con las propiedades esenciales para su correcto funcionamiento.
El objetivo principal, al fin y al cabo, es el de simplificar al máximo el espacio, para que los sujetos entren en un estado “zen”, consiguiendo además la máxima belleza en lo más simple. Por lo tanto, la idea no es sobrecargar los espacios, sino conseguir un lugar donde exista armonía de colores y que el contraste sea alegre y acogedor.
Partiendo de esta base, el minimalismo dentro de los espacios hospitalarios va más allá de una simple reducción en la decoración, necesitamos que se cree calma y que reine la claridad y concentración. Usando diferentes recursos, entre ellos, líneas rectas y simples, que no solo generan tranquilidad y nos ayudan a organizar de manera más eficaz, sino que también, son muy prácticas, ya que, es más fácil de mantener y de limpiar el espacio que generan.
Otro aspecto que se tiene muy en cuenta es la luz natural. Sin lugar a dudas, la iluminación es uno de los puntos más importantes en cualquier proyecto, pero más aún cuando se trata del minimalismo, ya que es uno de los pilares de esta tipología. Además, tiene múltiples beneficios, como que transforma el espacio haciéndolo mucho más acogedor y cargado de buena energía, lo que tranquiliza a los pacientes cuando tienen que asistir a una cita médica.
Por último, normalmente se utiliza un mobiliario funcional y cómodo, que combine y tenga coherencia con el resto del espacio. Para conseguirlo, debemos escoger elementos ergonómicos que sean funcionales, pero que no generen un gran contraste con el resto, para mantener así la armonía en toda la estancia.
Desde Árgola Arquitectos, este tipo de diseño es uno de nuestros favoritos, ya que persigue la máxima de conseguir más, con menos. Y es que muchas veces, en la arquitectura, sanitaria o no, no hace falta sobrecargar los espacios para conseguir un gran proyecto.